Cuál es el mejor día para observar las Dracónidas, la lluvia de estrellas que coincidirá con la luna nueva
La primera lluvia de estrellas del otoño ya está aquí. Este miércoles 6 de octubre arrancaba el periodo de actividad de las Dracónidas, una lluvia de meteoros q
La primera lluvia de estrellas del otoño ya está aquí. Este miércoles 6 de octubre arrancaba el periodo de actividad de las Dracónidas, una lluvia de meteoros que será visible en el hemisferio norte entre el 6 y el 10 de octubre. Pero, ¿cuándo será el día de máxima actividad? ¿Cuántos meteoros generará por hora?
Según los expertos del departamento de Astronomía del Instituto Geográfico Nacional (IGN), el mejor día para observar este evento astronómico será en la noche del viernes 8 de octubre. Las Dracónidas suelen generar en torno a 20 meteoros por hora a una velocidad de 20 kilómetros por segundo, aunque en años previos la tasa de actividad ha alcanzado los 600 meteoros por hora.
¿De dónde vienen las Dracónidas?
«El suave deslizamiento de una Dracónida a través del cielo es una vista hermosa», argumenta en un comunicado Bill Cooke, de la Oficina de Medio Ambiente de Meteoroides de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA).
En este sentido, será la noche del 8 de octubre cuando la Tierra atraviese una corriente de polvo que llega del cometa 21P/Giacobini-Zinner y cuyo resultado será esta impresionante lluvia de estrellas.
Estos meteoros provienen de la constelación boreal Draco y de ahí su particular nombre, al coincidir su punto radiante con esta constelación, cercana a la de la Osa Menor. Sin embargo, como apunta la NASA, no se necesita localizar la constelación para observar este fenómeno, ya que «los meteoros vuelan en todas direcciones a través del cielo estrellado».
¿Cuáles son las recomendaciones para su observación?
Además, la luna no será un problema para la observación, «ya que estará en fase de luna nueva y su brillo no perjudicará la observación de las Dracónidas», añaden desde la agencia espacial.
La principal recomendación es ir a un lugar en el que no haya contaminación lumínica, por lo que será necesario alejarse de las grandes ciudades. También es recomendable ir a campo abierto, es decir, a un lugar donde no haya obstáculos para la visión como edificios, montañas o árboles. Además, no es necesaria la utilización de ningún instrumento astronómico de visión para contemplarlas.