Moscú ampliará las instalaciones de Tartus para que atraquen grandes barcos
Rusia no está en Siria de paso, está para quedarse y por ello planea reconvertir sus instalaciones en el puerto de Tartus en una base naval permanente ya que la la base actual, heredada de tiempos de la URSS, no permite la llegada de grandes barcos. «Tendremos en el territorio de Siria una base naval permanente. Los documentos correspondientes ya están en la práctica listos», anunció el viceministro de Defensa ruso, Nikolái Pankov. El exjefe del Estado Mayor de la Armada rusa, el almirante Víktor Krávchenko, precisó que «se trata de crear una infraestructura completa. No son sólo barcos y muelles, sino un sistema de mando, medios de vigilancia y defensa, sistemas de defensa antiaérea y antibuques. También implica desplegar un importante contingente terrestre para proteger las instalaciones».
El primer paso para esta nueva base fue la llegada del sistema antiaéreo S-300 la semana pasada al puerto de Tartus, que se ha convertido en el primer punto fuera de Rusia blindado por este sistema que, según Moscú, tiene «un objetivo puramente defensivo». Los rusos cuentan además con la base aérea de Hmeymim, cerca de Latakia, desde la que operan la mayoría de sus aviones en Siria y que en agosto ya anunciaron que pensaban convertir también en «base permanente», para poder aumentar el contingente y la fuerza aérea desplegada.
Putin redobla su apoyo a Al Assad desde el punto de vista militar y diplomático
Pese a las críticas de Occidente, especialmente estas últimas dos semanas marcadas por los bombardeos contra el este de Alepo en los que han muerto al menos 500 personas, según los últimos datos del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), el presidente Vladimir Putin redobla su apoyo al Gobierno de Bashar Al Assad militarmente y desde el punto de vista diplomático. Rusia vetó la reciente propuesta de alto de fuego de Francia en el Consejo de Seguridad de la ONU.
El establecimiento de la base en Tartus es la puerta definitiva de los rusos al Mediterráneo y un primer paso para el afianzamiento en la región al que podría seguir la apertura de una base aérea en Egipto, según informó el diario Izvestia. Rusia parece decidida a revivir los tiempos de la URSS cuando ya tuvo bases en Cuba o Vietnam, y seguir así el ejemplo en la región de Estados Unidos, que cuenta con una fuerte presencia militar en el Golfo Pérsico.
Viaje a París
El anuncio de Moscú se produjo a las puertas de un viaje de Putin a Francia, uno de los países más críticos con la política rusa en Siria. «No estamos de acuerdo con lo que hace Rusia, que apoya el régimen de Assad, y que bombardeando Alepo da un regalo a los terroristas», denunció el ministro de Exteriores, Jean-Marc Ayrault Ayrault, en una entrevista a la emisora France Inter. El jefe de la diplomacia dejó en el aire el posible encuentro entre los presidentes Putin y Hollande el día 19 en París, aunque aseguró que «Rusia es un socio, no un adversario, pero al mismo tiempo hay un serio desacuerdo y hay que decirlo».