El PSOE marca distancias y subraya que presentará una enmienda a la totalidad
Mariano Rajoy disipó ayer las dudas que pudieran quedar sobre los Presupuestos Generales de 2017 y confirmó que los llevará al Congreso «en cualquier caso», haya acuerdo previo o no, según explicó ayer en «Los Desayunos de TVE». Su intención es que el proyecto de ley esté en el Parlamento antes de Semana Santa, para lo que se dispone a hablar «con todos».
Las cuentas públicas de 2016, aprobadas por la mayoría absoluta del PP a finales de 2015, están prorrogadas desde este 1 de enero. El Gobierno está redactando ya el nuevo proyecto de ley, según confirmaron fuentes de La Moncloa, y de momento ya ha hablado «mucho» con Ciudadanos y con Coalición Canaria, pero la disposición de Rajoy es intentar llegar a un acuerdo con el PNV y con el PSOE.
Los cinco diputados del PNV serían suficientes para rechazar las enmiendas a la totalidad, ya que se produciría un empate a 175 votos en la Cámara. Lo más complicado para el Gobierno viene después, cuando se presenten enmiendas parciales, que de hecho pueden cambiar unos Presupuestos de arriba abajo. El pacto con el PNV sería demasiado justo, en número de votos, para afrontar esa fase de la tramitación con tranquilidad.
La intención de La Moncloa es obtener cierta garantía de que no se le van a imponer unos Presupuestos que no son los suyos. Será el momento más delicado de la legislatura, aunque Rajoy se encargó de subrayar ayer que no piensa convocar elecciones, porque sería un «disparate». Su objetivo sigue siendo que la legislatura dure «lo más que se pueda».
La posición del Gobierno de enviar los Presupuestos a la Cámara no ha ablandado la postura del PSOE. Los socialistas presentarán una enmienda de totalidad porque dan por descontado que serán continuistas con la política económica y fiscal impulsada por el Gobierno en los años anteriores, según afirmó su portavoz, Antonio Hernando. No dejó resquicio a un posible acuerdo con los populares en el periodo de enmiendas parciales. «Presentaremos miles de enmiendas e iremos a ganarlas», aseguró.
Brecha en el PSOE
Los socialistas quieren evitar a toda costa que las nuevas cuentas abran una nueva brecha en el interior del partido y el grupo parlamentario. Menos aún que sirvan para dar un nuevo argumento que pueda utilizar Pedro Sánchez en su carrera por la recuperación del liderazgo de la formación. Su mensaje no deja lugar a dudas: el Ejecutivo tendrá que conseguir el apoyo del PNV.
Desde el Grupo Popular se afirmó que, más allá de los contactos mantenidos con el presidente del PNV, las negociaciones técnicas entre el portavoz parlamentario vasco, Aitor Esteban, y el equipo del ministro de Hacienda arrancarán cuando Cristóbal Montoro concluya las cuentas.