Uno de cada tres perceptores es un inmigrante, y el 13,6%no tiene vivienda
La Renta Mínima de Inserción, una ayuda de entre 400 y 650 euros que perciben en la región cerca de 30.000 familias, ha sufrido una evolución directamente relacionada con la crisis. Desde que comenzó el declive de la situación económica, en 2008, tanto el número de solicitudes como el de familias perceptoras, y las partidas presupuestarias destinadas a este fin, se han multiplicado por tres en la Comunidad de Madrid.
Los datos oficiales de la consejería de Políticas Sociales y Familia, que dirige Carlos Izquierdo, apuntan en esa dirección: se ha pasado de las 3.878 solicitudes presentadas en 2008, a las 12.840 de 2015. Una cifra que incluso experimenta un ligero repunte tras haber llegado al «tope» en 2012 -con 13.234 peticiones- y haber descendido en 2013 y 2014 -a las 12.908 y 12.011-.
Hasta septiembre, se han contabilizado 29.894 familias que cobran la renta
Prácticamente el mismo incremento se repite en las cifras del número de familias perceptoras, que eran 8.657 en el año 2008, al inicio de la crisis, y en el último ejercicio superaban las 26.950. Una cifra ya rebasada en lo que va de año– hasta el mes de septiembre de 2016, se habían contabilizado 29.894.
El último Consejo de Gobierno aprobó una ampliación del gasto en la Renta Mínima de Inserción para este año, por valor de 26,4 millones de euros. Esta cantidad se suma a los 120 millones que se habían destinado ya hasta el mes de septiembre, con lo que la inversión total en el año en esta partida se eleva a 146,4 millones de euros.
Perfil del perceptor
En cuanto al perfil del perceptor, los estudios señalan que el 34,8 por ciento de ellos llevan seis o más años recibiendo esta ayuda, mientras que un 15,5 por ciento lo tiene asignado desde hace 10 o más años. Uno de cada tres perceptores es un inmigrante, y de entre ellos, una clara mayoría -el 57,6 por ciento- son marroquíes. El 13,6 por ciento de quienes cobran la renta mínima de inserción no tienen domicilio, o residen en una infravivienda o en una vivienda ocupada.
Por lo que respecta a su nivel educativo, el 85 por ciento tienen un nivel de estudios de Graduado Escolar o inferior. Hay un 15,12 por ciento de los casos que carecen de estudios.
Además de ser una ayuda económica, la renta mínima incluye proyectos para facilitar el acceso al mercado de trabajo y la autonomía económica. Desde que comenzó a funcionar en el año 2002, el 50 por ciento de los perceptores ha dejado de recibirla porque ha mejorado su situación personal. Más de 24.000 personas han encontrado trabajo en este tiempo.