El FMI llega mañana a España en pleno debate de los Presupuestos

Una delegación del FMI (Fondo Monetario Internacional) irá mañana al Congreso en pleno proceso de negociación parlamentaria de los Presupuestos. La comisión estará liderada por Jeffrey Franks, director del FMI en Europa, y la responsable de la misión de este organismo para España, la alemana Andrea Schaechter, quienes almorzarán en el Congreso con los presidentes de las comisiones de Economía y Presupuestos, Cristóbal Montoro y Francisco de la Torre, respectivamente, además de otros diputados.

Esta cita se diferencia de otras de este tipo, que suelen celebrarse con carácter semestral, en que coincide con las primeras comparecencias presupuestarias, en concreto con la del presidente de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), José Luis Escrivá. De hecho, por ello se decidió fijar el encuentro en una comida para poder continuar con las comparecencias por la tarde. Hoy está prevista la del gobernador del Banco de España, Hernández de Cos.

El procedimiento habitual en estas reuniones es que los representantes del FMI expongan primero sus preocupaciones en relación con la evolución económica del país y después den el turno de palabra a los representantes parlamentarios.

Pero lo cierto es que el FMI ya publicó un informe en el que mostraba sus dudas acerca del acuerdo presupuestario del Gobierno de Pedro Sánchez. Fue en noviembre cuando el Fondo sacó a la luz el que iba a ser el último estudio de España en el marco de la ayuda financiera que recibió en la crisis y en el que revisó a la baja por segunda vez en solo mes y medio su previsión de crecimiento.

En concreto, el FMI mostró entonces su desconfianza sobre las previsiones de recaudación del plan presupuestario firmado por el Ejecutivo y Podemos y, más en concreto, las nuevas tasas a la economía digital y a las transacciones financieras. «Algunas de estas medidas tienen un impacto incierto, en particular aquellas que suponen por completo nuevos impuestos y políticas», sentenciaba.

Además, recomendó implementar estas medidas en un acuerdo internacional, algo que también han solicitado desde el PP. El FMI fue especialmente crítico con una de las medidas aupadas por Podemos en el plan presupuestario: la subida del 22% del salario mínimo, hasta los 900 euros anuales. El organismo dirigido por Christine Lagarde lo dejó claro: «Puede poner en riesgo el empleo, oportunidades para los trabajadores menos cualificados y los jóvenes».